Pues lo mejor es probar y si la cosa va bien «adelante».
He leído problemas, me lo dijeron en persona en una tienda cuyo nombre no escribiré nunca, yo mismo he volado sin la batería de la GPH3B+.
Después de un par de días alimentando la cámara con el zenmuse (H3-2D) volví a ponerle su propia batería. Leí quien pegaba una moneda detrás del zenmuse para equilibrar el peso que los ingenieros han pensado para los motores del gimbal. Me pareció una solución sencilla, inteligente, previniendo incidencias que sí se han publicado.
Me curé en salud y volví a meterle la batería. La idea era bajarle algún gramito el peso al gorrión, si voy a suplir el peso de lo que me ahorro para eso lo dejo todo como mandan los cánones.
Si bien es cierto que tras 6 baterías de Phantom 2 (volando ‘ligerita’ la cámara) me funcionan tanto la GoPRO como el gimbal en perfectas condiciones. Yo no he sufrido anomalía alguna.